- Mantener la calma
- Identificar la raíz del problema
- Ordenar los pensamientos
- Tener claro los objetivos: lo que se desea lograr
- Encontrarle alguna utilidad a dicha discusión
- Lidiar con el conflicto de forma colaborativa: analizar el problema desde a perspectiva de la otra persona y buscar soluciones en común
- Dialogamos civilizadamente para resolver los conflictos y mejorar nuestro entorno
- Aceptar que no siempre se puede tener la razón al 100%
- Estar dispuesto a ceder en algunas cosas
- No insultar
- Evitar ataques personales
- Aceptar que las personas son diferentes una de otra (diferente crianza, diferente forma de razonar y de resolver sus asuntos)
- Aprender a vivir con las diferencias, dejando el resentimiento de lado
- No tomar los altercados demasiado a pecho
- Pedir las disculpas del caso, si fuere el caso
- Aun cuando el otro no pida disculpas, ni sea tan consciente, ni quiera admitir su error; evitar caer en el mismo error
- Un error no se soluciona con otro error; un daño no se soluciona con otro daño
- Evitar centrarse solo en este momento y ver el panorama más amplio
- Aplicar nuevos acuerdos o tomar medidas para evitar que vuelva a producirse un altercado
- Recurrir a asesoría profesional, de ser necesario.
"Lo que no te mata, sólo te fortalece".
Recuérdalo.