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viernes, febrero 26, 2016

6 EFECTOS DEL ENOJO

- Atraes energía negativa
- Luego eso que transmites, se te devuelve
- Tus músculos se tensionan más
- Aumenta el estrés
- Va a afectar negativamente a la persona con la que descargaste tu enojo (hijos, pareja, familiares, colegas, etc.)
- La paz y tranquilidad no van a venir con el enojo
- Luego viene el arrepentimiento y las culpas
debido a las consecuencias negativas de la reacción, etc.

viernes, enero 22, 2016

EL HORROR DE VIVIR DESDE LAS EMOCIONES

Vivir la vida desde las emociones es como vivir entre olas, tsunamis y corrientes: revolcándote, hundiéndote, hundiendo a otros una y otra vez.
¿Vas de la alegría a la tristeza, del miedo al confort, de la aceptación al rechazo, de la sorpresa a la ira… y así va tu vida también?

Ahora blanco, ahora negro.

El problema no son las emociones, sino la parte inconsciente de ellas, se han vuelto los tiranos escondidos de nuestra vida.
El problema surge cuando las personas que las sienten se dejan llevar de manera excesiva por ellas, teniendo conductas que en vez de solucionar, les crean más problemas.
Ese penduleo emocional, es lo que conocemos como inestabilidad emocional:
altibajos que se dan en nuestro ánimo sin motivo aparente o por causas que no ameritan tanto drama.

Características de personas inestables:

- Les cuesta trabajo separar las diferentes áreas de su vida.
- Suelen ser dependientes e inseguros.
- Necesitan colgarse., apoyarse de muchas personas, si alguno les falla, se sienten perdidos, y se llenan de negatividad.
- Suelen tener un muy bajo umbral de tolerancia a las frustraciones.
- Tienen poco o nulo contacto con sus propios recursos en caso de que las cosas no salgan como desean.

¿Por qué son inestables?

El psicólogo Robert Plutchik, profesor Albert Einstein College of Medicine EEUU, señala hay 3 causas de que las personas no maduren con la edad:

1) Educación poco acertada: La sobreprotección familiar predispone a la inestabilidad.

2) Tránsito traumático hacia la madurez personal: Tener que afrontar las responsabilidades de la vida adulta, con sus éxitos y fracasos, hace que muchos se queden anclados en la inmadurez.

3) La búsqueda constante del ideal: viene de una educación basada en perseguir el perfeccionamiento y la excelencia en todo. Una infancia colmada de críticas es uno de los grandes fallos.

Fuente: Extracto del artículo: 8 factores de la inestabilidad emocional, de Mariana Peña.

“Cualquiera puede enojarse, eso es muy fácil… pero enojarse con la persona correcta, con el grado adecuado, en el momento justo, con el propósito correcto, y de manera efectiva… eso no es fácil”. Aristóteles.

Cambia tus emociones: cambia tus resultados

Explorando las conductas de nuestros niños emocionales

“Un niño es naturalmente reactivo porque no tiene espacio para contener el miedo o el dolor. No tiene espacio para diferir la gratificación o tolerar la frustración” Stepping out of Fear. Kirsh y Amana Trobe.

Reacciones y control

Según Krishnanda Trobe, en el libro de “Stepping out of Fear” (Saliéndonos del miedo):

Nuestras reacciones están controladas por los miedos de que a menos que reaccionemos y controlemos, algo malo nos sucederá o nunca obtendremos lo que deseamos.

Nos movemos en automático del detonante a la reacción sin ninguna consciencia de lo que está sucediendo o la razón de esto. Y el espacio entre ese detonante y nuestra reacción es infinitesimal.

Reaccionamos rápida y automáticamente porque sentimos que es un asunto de vida o muerte.
Reaccionamos cuando nos sentimos amenazados.
Reaccionamos para satisfacer nuestras necesidades.
Reaccionamos contra la otra persona cuando no nos sentimos seguros, amados o apreciados.

Diferentes tipos de reacción

Reacciones de ataque:

Demandar, exigir
Hacer dramas
Culpar
Atacar
Rebelarte
Vengarte
Enojarte y estar irritable hacia el otro
Criticar
Juzgar
Quejarte

Reacciones de movimiento hacia el otro u otros:

Armonizar, arreglar, acordar
Proponer, sugerir
Complacer
Halagar

Reacciones de retirarte:

Alejarte
Colapsarte
Deprimirte
Rendirte
Resignarte

Chequea el rol de las emociones en tu vida. 

¿Te toman o las transformas?

¿Qué detona nuestra parte emocional?

Amenazas: sentirnos atacados, invadidos, criticados, juzgados, que se metan con nosotros.

Dolor: sentirnos no apreciados, no considerados, rechazados

Expectativas: sentir las expectativas o demandas de alguien más sobre nosotros

Reflejarnos: ver cualidades en otros que no aceptamos o vemos en nosotros.

Compararnos: compararnos de manera desfavorable con otros

Miedo de perder algo o a alguien

¿Qué hacemos?

Ejercicio

Toma nota durante un día de las cosas que te molestan y activan tus reacciones. Escribe qué te molestó.
Qué fue específicamente lo que alguien dijo o no dijo, hizo o no hizo que causó esta molestia.
O si fue una situación, ¿que parte de esta situación fue la que causó tu enojo, molestia?
Ahora nota como reaccionaste tú a esta molestia. ¿Qué hiciste o no hiciste? ¿Cómo intentaste cambiar a la persona o a la situación? ¿Cómo intentaste cambiarte a ti?
Nota la respuesta que tu reacción causa en la otra persona y ¿cómo es para ti esa respuesta? Nota si obtienes lo que deseas de la otra persona.
Nota la emoción que está debajo de tu reacción.
Finalmente nota si este mecanismo de reacción es nuevo o te es familiar y si lo has repetido en el pasado.
Por: Martha Debayle

Sí se puede lograr, únicamente si admites tus errores, si te has dado cuenta de que quieres mejorar el control de tus emociones, si eres consciente de lo que te sucede y si haces lo mejor posible por solucionarlo.
Por: Psicólogo Luis Venegas Chalen

domingo, marzo 08, 2009

COMO CALMAR A UNA MUJER ENOJADA


COMO TRATAR A UNA MUJER FURIOSA
Toma el control

Ella está furiosa y tú estás igual, cansado o más furioso. Así que calma su ira en la manera que ella entiende: hablar de ello hasta el final. “La clave es llevar las cosas de una pelea a una discusión. No importa si es buena, mala o fea” dice el sargento Scottie Frier, un negociador de crisis del Condado de Lexington en Carolina del Sur. “Si vas a terminar una crisis contra otra persona, necesitas haberle dado confianza”.

Encuentra sus fusibles

Establece un parámetro. Empieza por detectar apariencias. Una situación de crisis podría ser sólo la necesidad de llamar la atención. “Algunas veces, las mujeres empiezan peleas para medir el nivel de interés y compromiso de un hombre” dice Nancy Fagan, autora de The Complete Idiot’s Guide to Romance. “Puede no tener nada que ver con el motivo por el cual está gruñendo”.

No le eches la culpa sólo a los cambios de humor mensuales.

“Bajo la ira están normalmente los sentimientos primarios de dolor o frustración” dice Charles Miron, educador sexual en Maryland. “Si escarbas bajo la ira y manejas esas emociones ocultas, ambos tenderán más a conseguir una salida mutuamente positiva”. Un indicio: ella toma rehenes. Si ella se reprime al sexo, puede ser serio. “Si hay problemas en el dormitorio, es porque hay ira” dice Susan Shepard, autora de How To Get What You Want From Your Man Anytime.

Da el tono

Baja las armas. “Debes dar el tono, el humor, los tiempos y la agenda de la discusión” dice Robert Mayer, autor de How To Win Any Argument Without Raising Your Voice, Losing Your Cool or Coming to Blows (Dios, qué tal título). Permite que se explaye. Puede ser que explote.
Frier sugiere decir “entiendo que estés enojada, pero es difícil para mí tratar de solucionar las cosas si continúas gritando”. Ese contraste con la realidad hace que ella evalúe su comportamiento. Usa el contacto visual para mostrar que estás escuchando y parafrasea sus argumentos para hacerle saber que estás oyendo lo que está diciendo. Pero ten cuidado con el terreno minado: es importante que sepas exactamente qué responder.

Resuelve la crisis

Haz el trato. “Ahora viene un esfuerzo común” dice Frier. Vamos a decir que tu posición es lógica y que estás convencido de tener la razón. “Si fuerzas algo en ella, vas a terminar con una chica rencorosa y resentida” dice Mayer.
“Debes hacerla sentir como que es parte del proceso” dice Frier. Pídele que ofrezca soluciones. Si hace un pedido que sea razonable, trata de sacar algo de provecho de ello. “En una situación de rehenes, lo primero que hacemos es pedir que liberen a los rehenes, sabiendo que no lo harán” dice Frier. “Luego los comprometemos pidiéndoles que suelten a uno. Gano porque sueltan a uno, y ellos piensan que ganaron porque sólo tienen que soltar a uno”. Sus rehenes emocionales necesitan algo de aire también.

No te enojes porque puede ser peor:

Lo peor que puedes hacer es enojarte. Cuánto más te enojes, más se enojará ella, porque no le gustará esa actitud. Paul Hauck, psicólogo de Illinois dice que cuando te estés por enojar, recuerda que “ella no te puede hacer enojar”. “Tú puedes ser responsable de su problema pero no de su reacción emocional”.

Si tienes la culpa admítelo:

Hay que ser sinceros también. Michael Staver, autor de ‘21 ways to defuse anger and calm people down” dice que si estás equivocado, lo mejor que puedes hacer es admitirlo. Buen punto, tanto para tratar con mujeres como con hombres. Lo mejor es ser sincero. Si tienes la culpa, ¡acéptalo!

Escúchala desde antes que se enoje:

Si la conoces, ya podrás detectar cuándo se está por enojar. Si sabes que está molesta por algo (ya sea porque conoces su mirada o sus reacciones) lo primero que tienes que hacer es comenzar a escucharla. Recuerda que a las mujeres les encanta que las escuchemos y les prestemos atención. Mejor prevenir que curar.

Ponte de su lado para que se termine la discusión:

No se trata sólo de darle la razón. Pero en algunos casos, si piensas que su enojo no está fundamentado por una base sólida, lo mejor que puedes hacer es ponerte de su lado y decirle que piensas como ella. De esta manera desarticularás su enojo. Frases como ’sí’, ‘tienes razón’ y ‘estoy de acuerdo’ pueden ayudar.