El novio que baila se llama Luke Rheault, y su madre Rebekah no puede moverse demasiado bien… porque va en silla de ruedas. Un año antes de la boda, le diagnosticaron ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica) y ya no es capaz de caminar y mucho menos de bailar sosteniéndose sobre sus dos piernas. Pero sí puede hacerlo con la tierna ayuda de su hijo, que no quiere que su madre se pierda ese momento tan especial.
Como dijo su recién estrenada esposa Kristeena, es una de las escenas más conmovedoras que nunca ha visto. Todos los testigos de esta bella danza emocional entre madre e hijo lloraron al contemplar la escena. También los que la ven a través de internet.
