Una de las cosas más importantes de una persona es saber cuáles son sus gustos, el hecho de conocerse a sí mismo es un factor que determina muchas otras cosas en tu persona, puesto que si te conoces a ti mismo sabes cuales son tus fortalezas y debilidades y una vez que otra persona busque hacerte daño no lo conseguirá siempre y cuando tu te sientas fuerte ante sus acusaciones, por eso es tan importante el auto reconocimiento, nadie puede hacerte de menos si tú sabes qué cosas de lo que se dice es verdad y qué mentira, pues como sabemos la gente de una forma u otra siempre va a hablar y nunca se le puede tener contento del todo a alguien, porque por más explicaciones que se den la persona siempre se queda con lo que quiere tomar, aunque se sepa la versión completa.
Cuando uno se acepta tal cual es y aprende a querer inclusive aquellos defectos que más le incomodan, ninguna otra persona podrá bajar su autoestima puesto que cree en sí mismo y es lo más importante. La seguridad en uno mismo, el hecho de sentirse feliz con lo que uno tiene, ampliar su panorama y no cerrarse ante problemas como este, hace a la persona más plena.
Para poder librarse de todas las malas vibras es importante saber que es lo que uno quiere y lo que se enfrenta, y aunque puede ser duro al principio opino que es mil veces mejor pasar por ese tramo amargo y vivir feliz después a vivir oculto toda una vida. Creo que las personas que logran pasar ese proceso de cambio y se transforman en quien siempre han querido ser, logran adquirir muchos conocimientos y sobretodo fortaleza, son personas admirables y todos deberíamos seguir sus pasos.
El proceso de cambio es lo más duro, ya que este cuenta con varias etapas y si no se supera la persona podría caer en depresión inclusiva suicidarse por el hecho de caer en negación y no aceptarse.
Las fases de dicho proceso son 4:
En la primera etapa, la persona se siente diferente, siente que es a la única que le pasa esto y no lo ve como algo normal, se asusta y se empieza a cuestionar sobre todo lo que les está sucediendo.
En la segunda etapa la persona se pone en negación, aunque esto sea más que lógico, ya que aún le cuesta creer que esto sea así.
En la tercer etapa es cuando ya la persona lo acepta para si mismo, pero aun no se anima a decirlo públicamente por miedo o pena.
La cuarta etapa es la más feliz ya que la persona lo acepta, lo comparte y aun así se siente tranquila con eso.
Esa es la etapa a la que toda persona debería llegar pues en cuestión de gustos no hay de qué avergonzarse pues es lo que te hace ser quien eres.
¡Quiérete, valórate, acéptate!
Fuente: openmind-revista.blogspot.com