Hay etapas de la vida en la que nos sentimos agotados, nuestro día a día con el trabajo, los niños, la casa, etc. hace que llevemos un ritmo frenético.
Pero debes saber que hay una gran diferencia entre una persona que se encuentra cansada debido a su día a día y quien se encuentra obstinado de vivir porque ha perdido la visión de futuro.
Te mostramos las señales que indican que estás en una fase de agotamiento físico y mental:
1. Te irritas fácilmente. Todo te molesta aunque no tengas motivo, necesitas estar solo para que nadie te moleste, es un síntoma de agotamiento. Si un problema sin importancia para ti se convierte en un gran problema, necesitas descansar inmediatamente.
2. Te molestan asuntos que no tienen importancia. Estás más sensible de lo normal y cualquier cosa te fastidia, pequeñas cosas que no tienen mucha importancia ahora te irritan. No permitas que esto suceda, relájate, medítalo y organiza tu vida para no sentirte siempre así.
3. Tienes nauseas y te mareas. Una persona mentalmente agotada, también lo estará físicamente, incluso pueden llegar a tener nauseas y mareos, si te ha ocurrido, ¡no puedes seguir así! lo primero es la salud por lo que debes tomarte un tiempo de descanso, lo primero es que tú estés bien para poder estar bien con los demás.
4. No te sientes nada motivado. No tienes ningún tipo de motivación en tu trabajo, lo que antes no te costaba nada hacerlo ahora te cuesta el doble, necesitas una nueva inspiración para volver a sentirte motivado y con ganas.
5. Ya no disfrutas como antes de las cosas que normalmente hacías y con las que te sentías a gusto. Esta es una clara señal de que necesitas un descanso tanto físico como mental.
6. Tienes ataques de ansiedad con frecuencia. Es una de las consecuencias de tu cansancio crónico, los ataques de ansiedad, si los tienes cada cierto tiempo no te permitirán disfrutar de diversas actividades. El estrés es malo para la salud, debes tomarte un pequeño descanso y valorar lo realmente importante.
7. Tienes problemas para dormir. Es un claro ejemplo del agotamiento extremo, el insomnio. La conciliación del sueño se te hace cada vez más difícil ya que no puedes dejar de pensar constantemente en aquello que te preocupa o en ese trabajo sin terminar.
8. Lloras sin motivo. En estos momentos de agotamiento estás más sensible que nunca, lloras por cualquier cosa y además no puedes evitarlo.
Llorar es la forma que tiene tu cuerpo para expulsar todo lo que llevas contenido por el agotamiento.
9. Te sientes en un limbo. No sabes muy bien que hacer con tu vida, si seguir como estabas o cambiar. La sensación más extrema que puede llegar a sentir una persona que se encuentra realmente cansada es la de que su vida no tiene sentido alguno. Nunca hay que llegar a estos extremos, es importante que reconozcas estos síntomas y les pongas fin.
Fuente: enteratedealgo.net