El vínculo del hijo con su padre proporciona estabilidad emocional.
Algunos en vez del padre biológico han tenido un padre de crianza, un padrastro, un abuelo, un tío, un padrino, etc.
El padre nos transmite los aspectos de masculinidad y seguridad de todo hombre, y ello evita o previene la desorientación incluso a nivel sexual (disforia de género), cuando ese vínculo ha sido saludable emocionalmente.
Los peores casos en la consulta psicológica son cuando dicen: no recuerdo haber jugado con mi padre, mi padre nunca me llevaba de la mano, no recuerdo un momento feliz con mi padre, tenía mal genio, no me crió entonces no siento nada por él, me hizo mucho daño y nunca le perdonaré, etc.
La buena noticia es que aun cuando el vínculo en el pasado no haya sido saludable, puede sanarse a nivel del subconsciente (donde están guardados todos los recuerdos) y un procedimiento seguro y comprobado (con evidencias científicas) para lograrlo es la Hipnosis Clínica.
Otra ventaja es que no necesitas hacerlo en persona con tu padre sino que se puede sanar en tu interior.
Como es a nivel mental (tu inconsciente), esta técnica tiene muy buenos resultados incluso cuando el padre ha fallecido, no se sabe quién es o no se tiene ninguna comunicación con él.
Al sanar el vínculo con el padre a nivel mental y emocional, te sentirás liberado, reconfortado y descargado de un problema mayor, viendo las cosas más claramente, y de allí vienen las demás mejoras en las demás áreas de tu vida.
Te lo garantizamos. Requisito: siempre y cuando tú desees hacerlo. Si no quieres hacerlo, no hay nadie en el mundo que lo pueda (o vaya a) hacer por ti.
Si ya deseas empezar la mejora de tu vida, puedes contactarnos en: