Mostrando entradas con la etiqueta google. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta google. Mostrar todas las entradas

viernes, noviembre 08, 2013

REFLEXIONES DE LA LUNA Y LA NOCHE


Agradezcamos lo que nos gustó y lo que no. Todo fue valioso. 

 Cuando brillas eres como una estrella.

 En vez de miedo, aplica curiosidad.

 Procura amar mientras vivas

 Aceptemos el día tal como fue y tendremos paz

 Todo es perfecto, completo y forma una totalidad.

Estoy a salvo. 

 Nuestro exterior e interior luminoso

 Restauración divina

La vida es simple. Nosotros la complicamos.

Puede hallar más imágenes con mensajes en: http://www.facebook.com/psicologosdelperu


lunes, octubre 28, 2013

8 ENFERMEDADES CAUSADAS POR INTERNET

8 NUEVAS ENFERMEDADES PSICOLÓGICAS CAUSADAS POR INTERNET Y LOS CELULARES

facebook, youtube, tumblr
A pesar de que es incuestionable que nuestra vida es más fácil gracias a Internet y los dispositivos electrónicos, estos tienen también su lado perjudicial, ya que son responsables de al menos ocho nuevas enfermedades reconocidas.

En los últimos años se han dedicado varios estudios a los efectos que tienen en nuestro cerebro las nuevas tecnologías. Ahora la consultora TechHive hizo una recopilación de las trastornos psicológicos más comunes entre los usuarios de Internet de todo el mundo.

El síndrome de la llamada imaginaria.
Hasta el 70% de los usuarios de dispositivos móviles han sufrido alguna vez la alucinación de que su celular había sonado o vibrado sin que en realidad lo hubiera hecho. La explicación es que nuestro cerebro ha empezado a asociar al teléfono móvil cualquier impulso que recibe, especialmente si estamos estresados.

Nomofobia.
Este término, derivado de las tres palabras 'no', 'móvil' y 'fobia', habla por sí mismo. Describe la angustia causada por no tener acceso al celular, y puede variar desde una ligera sensación de incomodidad hasta un ataque grave de ansiedad. Efectivamente, muchos son propensos a experimentar miedo al darse cuenta que su móvil no está donde debería estar.

Cibermareo. 
Esta palabra fue acuñada en los años 90, cuando aparecieron los primeros dispositivos de realidad virtual. Hace referencia al mareo que sienten los usuarios de aparatos de realidad virtual, y que son parecidos a los que algunas personas sufren cuando viajan en un medio de transporte. Solo que permaneciendo inmóviles.

Depresión del Facebook. 
Algunas personas se deprimen porque tienen muchos contactos en las redes sociales, otros por la falta de ellos. Lo más habitual es entrar en Facebook para alabar a los amigos, subir fotos o escribir sobre acontecimientos agradables. Pero los usuarios que pasan mucho tiempo en las páginas de redes sociales de otras personas suelen sentirse deprimidos por su vida cotidiana.

Dependencia de Internet.
Se trata de la necesidad enfermiza de estar todo el tiempo conectado a la Red. Puede llegar a afectar seriamente la vida privada y social de los adictos a Internet.

Dependencia de videojuegos en línea.
Esta dependencia está muy extendida. Recientemente, para rehabilitar a los que padecen esta enfermedad, se han creado varios programas consistentes en 12 fases, igual que la terapia de alcohólicos anónimos.

Cibercondria.
Otro trastorno muy común. Los que lo sufren se convencen de que padecen alguna o varias enfermedades de cuya existencia se han enterado en Internet. El problema es que uno puede empezar a encontrarse realmente mal a causa del efecto nocebo, lo contrario al efecto placebo.

Efecto Google. 
Es cuando nuestro cerebro se niega a recordar información como consecuencia de la posibilidad de acceder a ella en cualquier momento. ¿Para qué aprender algo de memoria si los buscadores nos permitirán encontrar cualquier dato cuando lo necesitemos? El problema es que esta enfermedad pueden padecerla no solamente los que no tienen ganas de memorizar, sino que todos los usuarios de Internet son susceptibles de sufrirla.

Fuente: http://actualidad.rt.com


viernes, diciembre 09, 2011

GOOGLE Y NUESTROS CEREBROS

Google está cambiando la forma en que nuestros cerebros recuperan la información, según una investigación de la psicóloga Betsy Sparrow, PhD, de la Universidad de Columbia.
Mediante una serie de cuatro estudios, Sparrow halló que somos mejores para poder recordar en qué sitio hallamos algo en Internet antes que recordar la información específica que hallamos.
Estos resultados, señala Sparrow, sugieren que los procesos de la memoria humana se están adaptando al advenimiento de la nueva tecnología de la computación y comunicación (Ciencia, 14 de julio).

Traducido del inglés al español por Psicólogo Luis Venegas Chalen

Texto original en inglés:

Google is changing the way our brains recall information, according to research by Columbia University psychologist Betsy Sparrow, PhD. Through a series of four studies, Sparrow found that we are better able to remember where to find something on the Internet than we are at remembering the specific information we found. These results, Sparrow says, suggest that processes of human memory are adapting to the advent of new computing and communication technology (Science, July 14).
APA Monitor, November 2011, Vol. 42, N° 10.

¿Cómo Google está cambiando nuestra memoria?
Ya no recuperamos los recuerdos como lo solíamos hacer.

Antes (sin Google): Sin acceso a Internet. Si queríamos averiguar algo, contábamos con una limitada fuente de opciones para investigarlo, como los libros disponibles en la biblioteca más cercana.
Ahora (con Google): Con Internet, todo está a un clic de distancia. Cuando no sabemos algo, recurrimos a la computadora para solucionarlo.

Antes (sin Google): Hallábamos formas de memorizar lo que necesitábamos saber recurriendo a nuestra memoria visual, interesándonos genuinamente en la información, creando asociaciones y más.
Ahora (con Google): Con los motores de búsqueda disponibles en todo momento, ya no solemos codificar la información internamente, porque cuando la necesitamos, la buscaremos en internet.

Antes (sin Google): La próxima vez que la información no esté disponible, tenemos más probabilidades de recordarla puesto que nos tomamos el tiempo para reforzar la información en nuestra mente.
Ahora (con Google): Cuando la información se guarda externamente, generalmente no la memorizamos, sino que recordamos el lugar dónde hallarla.

LAS CONSECUENCIAS
Nos estamos volviendo simbióticos con nuestras herramientas computarizadas. Nos relacionamos con ellas como si fuesen amigos cercanos en quienes podemos confiar. ¿Es eso bueno o malo?

CONSECUENCIAS POSITIVAS
Accesibilidad a una enorme memoria transitoria

1) Hemos almacenado información en nuestras memorias computarizadas y éstas se han vuelto mucho más accesibles que antes.
2) Nuestro recuerdo es inequívoco. Cada vez que recuperamos un recuerdo también lo volvemos a ejecutar. Google actúa como un veloz verificador, ayudándonos a evitar cometer muchos errores.
3) La información disponible no necesariamente debilita la memoria. Puede reforzarla y ser una gran fuente de innovación.

CONSECUENCIAS NEGATIVAS
Dependencia y conocimiento superficial

1) Estas herramientas han sustituido nuestra necesidad de memorizar muchos detalles; y sin estas herramientas podemos estar perdidos.
2) Nuestros nuevos hábitos pueden interferir en el desarrollo de conocimientos profundos y conceptuales.
3) Internet está plagada de información incorrecta que puede dar lugar a información inadecuada.

http://www.psicologosperu.com/

lunes, enero 05, 2009

COMO CRIAR NIÑOS RESPONSABLES

Por Bill Morris, Parade Magazine

http://www.psicologosperu.com/

Aunque los niños tal vez admiren a las estrellas de cine o a las figuras destacadas del deporte, los modelos más influyentes siguen siendo los padres. Si los guiamos con el ejemplo, es probable que nuestros hijos nos hagan sentir orgullosos. Aquí se ofrecen algunas estrategias que nos ayudarán a transmitirles el mensaje correcto.

1. Establecer límites… y hacerlos respetar

“Deje bien en claro las reglas, de antemano y por escrito”, aconseja Kenneth Kaye, un terapeuta de Chicago especializado en familia y autor de Family Rules: Raising Responsible Children (Reglas para la familia: criar niños responsables). Hay que mantenerse firme y no ceder. “Decir, por ejemplo, ‘si no estás en la cama a las 8, no te leo un cuento’. Tiene que haber alguna consecuencia, y el padre o la madre deben estar dispuestos a seguir en esa postura.

2. Elogiar solo los verdaderos logros

Judy Ford, autora y terapeuta de familia de Kirkland, Washington, recomienda elogiar a los niños con sinceridad. “Si se alaba excesivamente a un pequeño, este se sentirá ansioso”, afirma. “Los hijos perciben si se los está manipulando”. Kaye agrega: “Transmítale al niño cuán impresionado está usted por algo específico que él ha logrado. El elogio desmedido, falso o dicho en general no ayudará a desarrollar la autoestima del niño y podría hacerlo sentir con demasiados derechos”.

3. Dejar que los niños cometan errores

“Permita que el niño tome decisiones en cuestiones que no sean de vida o muerte, y luego deje que lo eche todo a perder”, propone el Dr. Charles Fay, un psicólogo de niños y autor que reside en Golden, Colorado. Si su hijo no se pone un abrigo y pasa la tarde temblando de frío, por ejemplo, es muy probable que la próxima vez actúe con más prudencia. “Los niños necesitan equivocarse y sentir las consecuencias; de ese modo tienen la oportunidad de proceder de manera diferente”.

4. Hablar… y escuchar

Jean Tracy, ex maestra y consejera de Edmunds, Washington, recomienda tener una reunión familiar de media hora cada semana. “Estos encuentros fomentan la aptitud de escuchar y hablar y también permiten a los niños solucionar problemas en grupo. Se planea en conjunto una actividad divertida, y todos se comprometen a llevar a cabo una acción específica para que la familia esté mejor”.

5. Asignar tareas a los niños y recompensarlos

“Las tareas demuestran a los hijos que su colaboración es importante para otros miembros de la familia”, sostiene el Dr. Phillip Colon, un psicólogo clínico de Garden City, Nueva York. Jean Tracy recomienda a los padres preparar una lista semanal de tareas y dar a los niños una compensación monetaria por completarla. Si bien algunos especialistas no están de acuerdo en pagar por esas labores, Kenneth Kaye afirma: “Darle a un niño la oportunidad de sentir que se ha ganado el dinero le enseña a ser responsable. Pero que no sea mucho. Un pago excesivo es un error”.

http://www.psicologosperu.com/