El vínculo paterno es tan importante como el materno.
El padre contribuye a la estabilidad emocional de los hijos.
El amor de madre es el tierno e incondicional pero el amor de padre es el que pone la firmeza y nos transmite seguridad.
Así como todo padre tiene derecho a su hijo asimismo todo hijo o hija tiene derecho a tener a su padre.
Por eso no se recomienda romper ese vínculo con el padre como cuando no permitan que el hijo o hija vea a su padre por determinadas razones.
Hay casos en que los padres causan daño; allí sí hay que tomar medidas.
También hay que evitar usar a los hijos para desquitarse del otro miembro de la pareja, por venganza, rencor, resentimiento.
Las cosas de pareja la resuelven los adultos. Los hijos no tienen por qué enterarse de las relaciones de pareja.
Cuando sean adultos, quizás lo comprendan.
Así sea la peor persona en el mundo, como todo ser humano debe tener también algo positivo cuando está sereno, calmado..
Si ama a su hijo, es bastante.
El problema es cuando el padre no ama a su hijo o hija y/o no se interesa ni se comunica con su hijo o hija.
Aunque estén separados los padres, siempre pueden hacer todo lo posible para comunicarse en forma civilizada, respetuosa, serena, calmada, responsable; y eso dará estabilidad emocional a los hijos.
Si desea sanar su interior o mejorar su vínculo como padre, la buena noticia es que se puede solucionar en:
No hay comentarios:
Publicar un comentario