miércoles, mayo 16, 2012

LA AGRESIVIDAD EN LOS NIÑOS



Un niño que empuja a otro para quitarle su avión, una niña que le araña a otra la cara porque no le quiso prestar un plumón, otro que le grita a la profesora porque no quiere esperar su turno para salir del salón: estos son sólo tres casos típicos de conductas agresivas que se observan con frecuencia en los nidos y jardines de infancia.
Pero, ¿a qué se deben estas muestras de abierta agresividad en niños tan pequeños? En primer lugar, como explica la psicóloga y psicoterapeuta Bertha De Pomar, la agresividad es un instinto que ayuda a una persona en formación a adaptarse a su entorno. Es necesaria para protegerse de un dolor, un miedo o una frustración. El problema empieza cuando ese instinto se convierte en una conducta negativa permanente que daña y dificulta el proceso de sociabilización con otros niños y su ambiente.
Entonces, como cada niño tiene una historia de vida distinta, como cada uno llega al nido con aprendizajes y necesidades diferentes, la profesora debe saber acompañar a cada uno en su proceso de adaptación en este lugar, donde por primera vez quizás está compartiendo con otros niños.

"Si después de un tiempo prudencial, la maestra ve que ese instinto es en realidad un comportamiento agresivo constante y que ella sola no lo puede manejar, lo mejor sería hablar con los padres del niño para analizar diversos factores y encontrar soluciones. Pero, incluso, la manera en que la profesora lleve esta conversación será clave, porque algunos padres podrían tomarlo como una queja, castigarían al pequeño y ahondarían en su agresivo comportamiento", afirma De Pomar.

En busca de factores
Uno de los principales factores que podrían determinar conductas agresivas en niños de edad preescolar es la crianza que le dan sus padres. Diversos estudios han demostrado que los padres fríos e inflexibles, que usan incluso agresión física para disciplinar, tienden a criar niños con agresividad.

Las nalgadas, los jalones de orejas, los correazos y otras agresiones físicas no son las más adecuadas porque provocan no sólo daño corporal sino también humillación. El niño o niña se hace resistente y podría reaccionar también de manera violenta. "Además, si la consigna es enseñarle al pequeño a autorregular ese instinto natural llamado agresividad, ¿cómo puede el padre o la madre dejarse llevar por la misma falta de control?", agrega De Pomar.
Otro de los factores que se cultivan en el hogar son los modelos mismos de agresividad. Los gritos, insultos, amenazas, golpes y otras agresiones físicas y verbales entre los padres pueden provocar problemas emocionales y diversos desórdenes en la conducta de un niño, entre ellos precisamente un comportamiento agresivo. En este ambiente, ¿cuál es el mensaje para el retoño? Que cuando una persona supuestamente nos molesta debemos agredirla como ellos lo hacen.
¿Y cuenta también el temperamento del niño? En efecto, este puede coadyuvar también en una conducta agresiva, sin embargo es deber de los padres y maestros enseñarle a canalizarlo favorablemente durante su proceso de adaptación y sociabilización.

Más factores: la TV y los medios
Además de los factores citados, es innegable que los medios de comunicación masiva, especialmente la televisión, pueden ocasionar conductas agresivas en los niños. La mirada de la crítica está sobre todo en aquellos programas en los que la violencia -expuesta abiertamente- es el ingrediente principal.
Por ello, como explica la psicóloga y psicoterapeuta Amalia Donayre, es muy importante que los padres presten atención a los programas que los niños ven en televisión y saber qué juegos de video gustan (en especial, cuando van a cabinas públicas). También enseñarles a discernir las consecuencias de agredir a alguien en la ficción y en la realidad será crucial. Sin diálogo, ¿cómo sabrá el niño qué es lo adecuado?
"Se estima que el niño, al tener entre cinco y seis años, deberá haber aprendido a autorregular su agresividad y evitar conductas agresivas con sus pares", finaliza la especialista Donayre.

Fuente: http://www.eduquemosenlared.com

martes, mayo 15, 2012

EL CANTO: UN ALIMENTO PARA EL CEREBRO DE LOS NIÑOS



¿Quién no ha oído el refrán 'Quién canta sus males espanta'? Cantar no sólo es una buena herramienta para ayudarnos a enfrentar con buen humor las adversidades, como también un buen alimento para el cerebro de los niños, según los hallazgos médicos del Ministerio del Departamento de salud pública, de Alemania.
En el estudio, que contó con la participación de 500 niños del curso infantil, se observó que un 88 por ciento de los niños que cantaban con frecuencia, estaban preparados para la escolarización normal, en comparación con sólo el 44 por ciento de los niños que cantaban menos a menudo. De este modo, el estudio concluye que los niños necesitan, desde sus primeros años de vida, de más estímulos musicales. Cuánto más cantan en sus juegos, más nutridos estarán sus cerebros.

Cantar estimula el cerebro de los niños


Cantar funciona como una potente vitamina en el cerebro de los niños. Al jugar cantando los niños consiguen centrarse más en si mismos y en el momento en que están viviendo. El canto les ayuda a sentir la intensidad de sus actividades. Además, permite transformar cualquier momento de estrés, de tensión o de ansiedad, en un instante más sereno, tranquilo y relajado.
La música relaja. Tal vez por eso los niños consigan una mejor concentración en los estudios. El estudio demuestra que jugar cantando apoya el desarrollo de los niños en todas las áreas, sean física, mental y social, en una medida que se ha subestimado. Cantar les ayuda a desarrollar el habla más adecuadamente, les permite mejorar su conducta social y su comportamiento frente a la agresividad, ya que al cantar se les reducen las hormonas que desencadenan la agresión. Cantar también hace que los niños produzcan mayor cantidad de hormonas que desencadenan el sentirse bien. Ya decía yo que cantar era bueno. Otra cosa es cantar bien, claro.
Fuente: Vilma Medina. Directora de GuiaInfantil.com

domingo, mayo 13, 2012

EQUIPAJE



ESCRITOS SIN ANESTESIA

Hay muchos tipos de equipaje que llevamos con nosotros y que sabotean nuestra felicidad y éxito.

Viejas heridas, palabras duras, actos inacabados, desconfianza de uno mismo, promesas rotas y miedos.

Estas – y muchas otras más- son las cicatrices que nos han infligido muchas de las personas que nos rodean.

Permite que todo esto se vaya, antes de que te sofoquen y envenenen sus actitudes y acciones.

No permitas que el sol se ponga hoy, sin perdonar tus errores del pasado o a todas aquellas personas que te han hecho mal (desde el desaire más pequeño a la más grande injusticia).

El verdadero propósito del perdón es aliviarte de una carga negativa.

Deshazte de todo el equipaje viejo, cualquiera sea su forma, antes de que se vuelva parte permanente de tu manera de ver, de tus actitudes y tus conductas.

Fuente: Amor Incondicional En Acción


viernes, abril 27, 2012

ERRORES GARRAFALES EN UNA ENTREVISTA



Preparación es la palabra clave cuando enfrentes una entrevista de trabajo. En estos casos, no dejes tu suerte a la improvisación, por más desenvuelto, listo o divertido que creas ser.
Algunas equivocaciones fatales durante una entrevista de trabajo son:
- No conocer a fondo el perfil de la vacante y lo que se espera del aspirante.
- No contar con una presentación personal vendedora que resuma: ¿Quién eres?, Qué experiencia tienes?, ¿Por qué la empresa te necesitaría?
- Falta de conocimiento del candidato sobre la empresa o el puesto de trabajo al que aspiran.
- Exceso de autoconfianza, hablar demasiado cuando no te han preguntado nada.
- No investigar la dirección donde se llevará a cabo la entrevista, ni calcular el tiempo de llegada.
- Impuntualidad.
- Mala presentación personal.
Lo principal es identificar los puntos clave que has de comunicar a la persona o las personas que te van a interrogar. En comunicación con Mass.pe, Valerie Travezán, editora de Contenidos de Universia, señaló que para una entrevista de trabajo es recomendable tener cuidado con algunos detalles que podrían generar una mala impresión a los empleadores:

1. Imagen. Tu ingreso a la empresa puede depender de la primera impresión. Imposible descuidar tu higiene personal ni el vestuario. Si no estás seguro de qué ponerte, de preferencia opta por lo formal. Nada de prendas o peinados llamativos.
2. Actitud. ¡Olvídate del negativismo y la tensión. ¡Estos se perciben a kilómetros de distancia! Ve siempre con una actitud optimista, seguro de ti mismo. Un saludo cordial y una buena sonrisa nunca estarán de más. Eso sí, nada de exceso de confianza.
3. Experiencia. No menosprecies tus experiencias y conocimientos por más básicos o de corto tiempo que hayan sido. Por el contrario, resáltalos y dales valor. Incluso la experiencia adquirida en tu centro de estudios vale. Ten en cuenta que si pasaste de una simple vista del CV a una entrevista personal, es porque encajas en el perfil. No desperdicies lo ya ganado.
4. Infórmate. Procura además informarte con tiempo sobre la empresa y pensar en propuestas de su interés. Esto podría darte unos puntos extra y hacerles ver que no pueden desperdiciar tu talento. Es útil pensar antes de la entrevista en nuestras fortalezas y debilidades pero también en cómo las aprovechamos y las superamos, respectivamente.
5. No reniegues de tu pasado. Nunca hables mal de su antiguo trabajo por malo que haya sido en cualquier aspecto. Cuidado con tus comentarios al momento de la pregunta: "¿Por qué te retiraste de tu último trabajo?" Por lo general, el empleador siempre tendrá como premisa que todo lo que hagas con otra empresa, se lo harás a él también, y con justa razón.
6. No pienses todo el tiempo en el salario. Es un factor importante al momento de buscar un trabajo pero no el primordial en una entrevista, así que, de preferencia, no preguntes "cuánto es". Bueno, lo mejor es esperar a que el mismo empleador lo haga. Si de todas formas deseas estar seguro del panorama, averigua con amigos o gente de mucha confianza que ya esté laborando en ese lugar o que sepa algo de él.

Fuente: mass.pe

jueves, abril 26, 2012

EL HELADO BENEFICIA A PACIENTES CON CANCER

El helado beneficia la salud y estado de ánimo de pacientes con cáncer

El estudio realizado en los hospitales de Terrassa y Sabadell determinó que este fresco postre también mejoró el comportamiento social de los enfermos.

No hay que esperar al verano para disfrutar de un buen helado.

Tampoco es un postre que solo lo puedan tomar unos cuantos.

Según una publicación de la ABC de España, un estudio hecho en los hospitales de Terrassa y Sabadell determinó este fresco y sabroso postre es beneficioso para la salud y estado de ánimo de enfermos de cáncer.

Esta investigación fue publicada en la revista científica “Clinical and Translational Oncology”.

Durante un año se añadió helado casero en la dieta de todos los enfermos.

Y los resultados fueron muy positivos.

“La inclusión de helado mejoraba significativamente su calidad de vida, disminuía su ansiedad y mejoraba su comportamiento social, además del estado nutricional monitorizado a lo largo del estudio”, señaló Àngels Arcusa, responsable del Servicio de Oncología del Consorcio Sanitario de Terrassa.

Los helados fueron elaborados por el maestro artesano Angelo Corvitto, que creó una receta con alto contenido proteínico.

“Tuvimos que incrementar al máximo los ingredientes como la grasa láctea para incrementar el nivel proteínico, y además de alimentar añadíamos un plus, que es una sensación de felicidad que aportan alimentos como el helado”, dijo Corvitto.

Fuente: Diario El Comercio
Miércoles 25 de abril de 2012
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miércoles, abril 25, 2012

POP CORN PARA BAJAR DE PESO

Maíz pop corn puede incluirse en la dieta para bajar de peso:

La mejor forma de consumir el pop corn es colocando las semillas del maíz en una olla caliente con poco aceite y dejarlas reventar, agregando al final algo de sal.

Consumir canchita es nutritivo y saludable.

La canchita, pop corn, es una variedad de maíz, que al igual que otras aporta básicamente almidón (carbohidrato), fibra y a un bajo nivel de calorías.

Una taza de pop corn (8 gramos aproximadamente) nos da tan sólo 31 calorías, de tal manera que quienes quieran cuidar su peso o estén en tratamiento para bajar de peso, pueden incluir este snack.

Otra razón importante para incluir el pop corn a nuestra dieta es un reciente estudio dirigido por el Dr. Joe Vinson de la Universidad de Saranton, en el que se encontró que la cutícula (la cascarita) de este maíz concentra cantidades de polifenoles similares a las frutas.

Esto significa que podemos considerar al pop corn como un alimento con capacidad antioxidante, es decir protector frente a los efectos nocivos de los radicales libres.

La mejor forma de consumir el pop corn es colocando las semillas del maíz en una olla caliente con poco aceite y dejarlas reventar, agregando al final algo de sal.

El pop corn de microondas puede variar en su aporte de calorías, la variedad baja en grasa y sabor natural es la más similar a la hecha en casa.

Sin embargo, debemos considerar que algunos agregados como la sal, mantequilla, dulces entre otros ingredientes que suelen estar presentes en el pop corn del cine o en muchas de las variedades de las empacadas para microondas, pueden hacerlo menos saludable.

Asegúrate de evitar o reducir estos adicionales ya que en exceso perjudican la salud especialmente cardiovascular, además incrementan las calorías considerablemente.

Por: Licenciada Sara Abu Sabbah - nutricionista
Fuente: RPP Noticias

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