La actividad física puede llegar a contrarrestar la ansiedad.
No es necesario que te dediques a practicar algún deporte (aunque no nos vendría mal), la idea es que tu cuerpo esté en movimiento.
Si no eres muy adepto a hacer ejercicio, algo simple y breve que puedes hacer es, por ejemplo, levantar la pierna derecha y luego la izquierda por breves minutos y repetir, mover los brazos hacia arriba y abajo, rotar los hombros hacia atrás y hacia adelante, voltear el cuello hacia la derecha y hacia la izquierda, estirar brazos y piernas, etc.
Incluso también puedes hacer ejercicio echado en la cama. moviendo las piernas como bicicleta en el aire, mover los brazos, estirarte al máximo, estirar dedos, manos y pies. cruzar una pierna hacia el lado opuesto y luego la otra, alzar ambas piernas hacia adelante y/o hacia arriba, etc.
Como puedes ver, existen variadas formas de hacer ejercicio sin que sea tedioso, complicado o aburrido.
Es cuestión de aplicar tu creatividad y escoger aquellos ejercicios que te ayuden a lograr lo que deseas.
Si deseas un mayor apoyo a nivel emocional, mental, espiritual y/o psicológico, te puedes informar sobre el servicio que se brinda aquí en